Quien te crees para volver al nido que no ayudaste a crear,
al traer una carga que no deseas llevar,
al mirar atrás el fuego que en cenizas queda ya,
al pensar que el llanto que por ti se derramó, inundaría mi alma sin tu
presencia.
Quien te crees para ser un abrazo nunca recibido,
un beso que secó mi garganta, vacío, impío y frío.
Un lágrima que nunca cayó, se esfumó, se evaporó.
Un te quiero jamás dicho, perdido en el espacio, olvidado y odiado.
Quien te ama ya no está, tu semilla te olvidó,
no hay ni un eco de tu adiós, ni un suspiro del ayer,
ya no hay cálidos susurros en mañanas abrazados,
no hay sonrisas en el parque, ya no hay tiempo de extrañarte.
Te dejo el pasado que viniste a buscar, búscalo enterrado entre las
capas del olvido,
encerrado entre paredes y encadenado a este nicho,
te dejo para que no me extrañes tu a mí, teniéndome sin tenerme,
estando sin estar,
aferra fuerte el recuerdo que te acompaña en adelante, a donde voy tu
no me sigas, ya tengo mapa del lugar, a donde voy ya no hay mentira, voy hacia
la felicidad.
-Johe-